Siempre es importante realizar nuestros trabajos en un ambiente en el que nos sintamos realmente a gusto, pero en lo que al arte se refiere es imprescindible pintar en un entorno relajado para poder concentrarnos, conectar con nuestra creatividad y centrar nuestra energía en cada trazo, en cada pincelada. No importa si pintamos en interior o en exterior, debemos buscar o crear un lugar en el que las condiciones sean óptimas para la pintura.

Cuando pintamos al aire libre los sonidos que provienen de la naturaleza nos invitan a encontrar fácilmente la inspiración, pero en  algunas ocasiones nos encontramos con condiciones meteorológicas adversas, por lo que es esencial buscar un lugar que nos proteja del viento, del sol o de la lluvia, evitando así que nuestro trabajo se estropee.

Pintar en el interior es más sencillo, pero aún así, tendremos que buscar una habitación solo para nosotros y crear un ambiente que nos relaje, escuchar algo de música y una luz lo más natural posible pueden ayudarnos a trabajar de una manera más cómoda para buscar la inspiración.

Cómo veis, tanto si trabajamos en interior como en exterior, es imprescindible crear o buscar el ambiente idóneo para conectar con nuestro artista interior y poder dar lo mejor de nosotros mismos en cada uno de nuestros trabajos.